Se encuentran entre las flores que requieren de menos mantenimiento. Poseen la producción más alta de flores cortadas y plantas de jardín que pueden crecer. En un buen año, florecen a inicios del verano y hasta el otoño avanzado, especialmente si se les da el cuidado adecuado.
Estas flores multicolores de punta vienen en todas las formas y tamaños, se extienden entre pompones de 5cm a unas de grande tamaño como 20cm. La mayoría crecen al menos un metro o metro y medio de alto.
Aunque no son adecuadas para climas extremadamente húmedos y calurosos, las Dalias iluminan cualquier jardín soleado durante al menos 120 días. Les va mejor en los climas frescos y húmedos, en estos lugares las floraciones pueden incluso ser unos centímetros más grandes.
Para mejores resultados, deben ser plantadas a inicios o mediados de primavera. Necesitan un lugar soleado para prosperar, un área que reciba por lo menos 8 horas de luz directa del sol.
Tengan en cuenta que cada planta genera no menos de 4-5 bulbos a escasa profundidad del suelo. Al inicio del invierno el tallo y hojas de la planta se secan pero los bulbos se mantienen sin alteraciones ya que no sufren demsiado el frio.
Lo conveniente es separarlos en ese momento y volverlos a transplantar en otra posición de a uno. En primavera tendremos un hermoso jardín de dalias.
La dalia es una de las plantas que en primavera tiñe los jardines de colores pudiendo alcanzar (y superar) el metro de altura.
Símbolo nacional.
La dalia es una flor con cualidades alimenticias, nutricionales y ornamentales, pero también tiene propiedades medicinales y como se localiza en casi todo México, fue declarada la “flor nacional”.
En México existen 41 especies, tres de ellas en peligro de extinción.
La dalia gigante es una de los pocas variedades que florece en invierno con un clima no demasiado rígido, sus flores pueden llegar a tener un tamaño de unos 25 centímetros.
Los tulipanes representan para Holanda, lo que la dalia representa para México.
Sin embargo, desde el punto de vista comercial, los holandeses han aprendido a valorar mucho mejor su producto exportándolo a todo el mundo, y haciendo del mismo una marca de calidad y prestigio.
Durante la presidencia de Adolfo López Mateos, la dalia fue declarada “flor nacional”, representante de la floricultura mexicana, de acuerdo al decreto expedido el 13 de mayo de 1963.
El tamaño de la dalia enana puede variar desde 30 a 60 centímetros, es ideal para colocarla en pequeñas macetas.
La dalia es una planta noble, resistente y útil.
La dalia es una planta noble, ornamental, alimenticia, ceremonial y forrajera, pero en el ámbito medicinal ayuda a combatir problemas de nutrición y contribuye en la lucha contra la obesidad y la diabetes, las pandemias del siglo XXI.
Es la flor nacional de México y es en este país donde encontramos la mayor cantidad de material divulgativo referido a esta flor. Precisamente el primer nombre dado a esta flor en náhuatl (una macrolengua yuto-nahua que se habla en México) fue atlcocotlixochitl, que viene de: a-tl (agua), coco-tli (tubo) y xochitl (flor).
Sin embargo fue en Gran Bretaña donde se creó la primera Sociedad Nacional de la Dahlia en 1780.
Desde hace algunos años, la Universidad Autónoma de Chapingo abordó el estudio medicinal de la acocoxóchitl, lo que le ha permitido validar la sabiduría ancestral.
Durante el invierno los tallos y flores desaparecen pero los bulbos se mantienen en estado vegetativo.
Una planta noble desaprovechada medicinalmente.
La dalia es una especie desaprovechada medicinalmente, ya que puede resolver algunos problemas de salud de manera eficiente y económica.
Se ha utilizado como remedio contra la tos crónica y contra los cólicos, y posteriormente se probó su efectividad bacteriostática (no mata a la bacteria, impide su reproducción; envejece y muere sin dejar descendencia), fungicida y expectorante.
La inulina -el principal compuesto de los camotes de esta flor- ofrece amplios beneficios para la salud, ya que es una sustancia natural apta para diabéticos porque regula los niveles de glucosa en la sangre.
Sus tubérculos son ricos en fibra dietética de bajo nivel calórico que ayudan a regular el tránsito intestinal, mejoran la flora intestinal, alivian el estreñimiento y evitan el crecimiento de agentes patógenos generadores de cáncer de colon.
Las dalias también son fuente de fibra natural y fibra dietética que reducen los niveles de colesterol y triglicéridos, ayudan a bajar de peso y regulan la presión arterial debido al ordenamiento del metabolismo.
Sus componentes también permiten disminuir el riesgo de osteoporosis gracias a la absorción de minerales, específicamente el calcio, así como antioxidantes contra el envejecimiento prematuro.
Para que lo disfruten verdaderamente les dejo este estupendo video de la Universidad Autónoma de Chapingo:
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