Las ventanas coronadas por lunetas o alabastro precioso en Sana'a (Yemen del Norte).

Ventanas coronada por tragaluces con cristales de colores o alabastro precioso, dan una atmósfera de cuento de hadas en la antigua ciudad de San'a ' en Yemen del Norte.

San'a ', que fue la capital de Yemen del Norte desde 1990 es la capital de la reunificación de Yemen. Situado en el centro de una vasta meseta, está rodeado por muros y con los típicos de varios pisos yemeníes edificios, el desarrollo comercial, cultural y económico del país. Está dividida por paredes interiores en tres distritos (árabe, turco y judio).

De acuerdo con la tradición de la fundación de la ciudad se remonta a los tiempos bíblicos, fue fundada por Sem, el hijo mayor de Noé y semita progenitor poblaciones, que después de abandonar su país se encontró ante el ʿ Rub al-Khali, el "Cuarto Vacío" - terrible desierto de arena - y, posteriormente, una tierra de altas montañas y valles fértiles y decidieron fundar una ciudad: San'a '

En 1970 Pier Paolo Pasolini rodada en escenarios San'a 'de la película La flor de las mil y una noches, el último día de rodaje, impresionado por la belleza de la ciudad, comenzó a pasar las murallas de Sana'a, una forma breve documental de un llamamiento a la UNESCO para garantizar que se protegen y conservan la belleza de la antigua ciudad como patrimonio histórico y cultural de toda la humanidad. El atractivo de Pasolini fue aceptada y en 1986 la ciudad vieja de Sanaa "fue declarado Patrimonio de la Humanidad.
La capital, Saná, con sus casas torre decorada con tiza ocre, decenas de minaretes, el zoco al-Milh donde en una mezcla medieval los aromas de cardamomo, café ", el incienso y la mirra de los colores de las sedas, el brillo de Jambie incensario y expuesta fuera de los locales.
La región de Marib, una época fértil hasta el punto de definir esta área "Arabia Felix", donde reinó la legendaria reina de Saba, Bilqis a los árabes, que la leyenda dice que nació de la unión de un Himyarite príncipe con la hija del rey de Ginn. El milagro de Shibam, donde, entre el desierto árido y mesetas Ramlat Al Sabatein, a una cuadra de la tierra 'rascacielos' 500 prima de 7-8 plantas con indignación siglos resiste a los elementos.

Y luego, en una sucesión de mesetas, desiertos, cañones, montañas, valles, pueblos y wadis cuya belleza es impresionante: el Hajjarin, Zabid, Hajjara Al, Jibla, Thula, Kawkaban. Una razón Pierpaolo Pasolini lo llamó, arquitectura, "el país más bello del mundo. Estilo yemení, un rompecabezas resuelto sólo parcialmente, o sólo unos pocos saben que, si no hay una solución".

Y si los paisajes naturales y la arquitectura son un festín para los ojos, el orgullo, la bondad, la disponibilidad y de la bondad de estas personas, que son para el corazón. Los niños que gritaban en las calles o con vistas al impuesto minúsculo de color tierra edificios, con sus rostros ingenuos, sus gritos de asombro al ver otra vez a través de la visualización de una habitación, sus ojos se volvieron hacia el cielo, como para seguir con el ojo un día menos duro. Las mujeres, la presencia silenciosa, cuerpos delgados cubiertos con un velo que sólo guarda los ojos. Sus ojos vigilantes que van más allá del "cada tejido, cada barrera artificial colocado entre ellos y el mundo del mal.

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fuente: Images Photo Gallery

 

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